In ictu oculi

Virgen de la Encarnacion

Virgen Angustia

Atardece. El sol, detras de la ciudad se despiede con sus tonalidades, buscando los campos del Aljarafe van difuminando este frio dia lleno de silencios y vacios. El aire presenta sus intenciones invernales y la opresion de la melancolia se hace presente.

Los dias postreros de agosto y sus tardes comienzan a despedirse con una luz distinta, que inunda la vida en difuminarla con otra epoca pasada.

Afligidos en un tiempo que reconforta, vuelve el ocaso laconico con su recato placentero de buscar Sevilla con otro sabor. Oleada de espiritu, brisa, clarin y frescor floral que acompaña al dia de todos los Santos.

Un rito clasico y transcendente de "in ictu oculi" fruto añorado que nos hace soñar cuando vemos nuestros titulares vestidos de luto durante el mes de noviembre. Todo indica el comienzo y fin de un ciclo. Visitar sus iglesias y templos.

Sonidos como "amarguras" "Jesus de las penas" "Virgen del Valle" "saetas del Silencio" nos hacen viajar por los sentidos y que nuestros seres queridos esten mas presentes que nunca.

Volver a empezar. Pasear de nuevo la vida. Pedir que vuelva la tranquilidad de otras epocas para saborear el momento y rezagarte. Volver a vivir... y con los bolsillos llenos de recuerdos, buscar de nuevo la emocionada reconciliacion con tus tradiciones. Como los huesos de Santo en estos dias de noviembre. Visitar tu alma en el Sagrario para empezar un nuevo ciclo. Buscar a Dios en la cotidianidad de cada dia. Ya oigo las noches frias de solsticio. Y con ello el tintinear de una nueva epoca.

Asi como siempre el dia 1 de noviembre el clasico rosario de la aurora por su feligresia desde la calle Feria.