lunes, 26 de enero de 2015

Color de Sevilla

En esta retahíla de días, en la que se acerca a lo lejos una nueva primavera, donde apuramos la memoria para que se haga presente, una secuencia de emociones que vienen engarzadas como en un rosario construido con el amor, cariño y la dulzura del momento. Son cuentas que vamos acariciando mientras recitamos evocar la imagen alegre de nuestras fiestas. Pasa el tiempo y seguimos investidos por el recuerdo, de aquellas tardes soleadas de cofradías y volantes con muchos lunares donde parece que se contuvo el tiempo, por la remembranza diaria de tu alegría derramada añoranza de aquellos abrazos que nos regalaste, desde entonces no supimos que eran hermoso presente que íbamos a echar tanto de menos. Será cosa de la inocencia infantil, de la ley certera que prima en toda persona de linaje Sevillano. O será, que no teníamos conciencia del tiempo, de las horas que se precipitaron hasta hacernos ver que lo humano expira ante la fuerza de la providencia. Que los momentos pasan y no vuelven.
Estos días comienza aumentando su luz, alargando las tardes, invistiendo con la nostalgia el ambiente, para que llegue otro mes de Abril e intentamos disimular, con más torpeza que acierto, lo que nos descubren a la verdad de tu ausencia. Son estos días en los que vamos renovando las ilusiones, que nos acercan a la memoria, a los instantes que ya dábamos por perdidos y que retornan con una aureola de alegría para descubrirnos efimeramente. Y con ello, se va dando confirmación de los diferentes artistas protagonistas y su ilustración, para este nuevo curso de la primavera 2015. Por ejemplo la portada de la feria inspirada en el museo de Bellas Artes. También el cartel Maestrante para dar luz a una temporada Taurina ó el reciente cartel por el ayuntamiento para anunciar las fiestas primaverales con cierto aire ecuestre, aniversario de 50 años el Gran Poder en la Basilica de San Lorenzo y el eterno Curro Romero.
Déjame invitarte a estimular tu imaginación, haga vuelo entre las estrellas y conformar un paraje donde recuperar la fantasía e ilusión que nos mantiene en vilo el alma, para que así puedas dibujar estos carteles a tu manera. Porque Tu eres el protagonista. Envuelve este diseño proyectándolo en la alegría de los sueños, en esa quimera que se desplaza por la calle de tu infancia, por aquellos lugares, que sigues reconociendo, en los que te sentiste una vez repleto de emociones.
Intenta plasmar en este cartel de Tu primavera ese tiempo lleno de palios, flamenco y Tauromaquia que fue desangrando tu juventud, y convertirlo en escenario de juegos, tropelías y risas alertando las esquinas, el tiempo recuperado de tu niñez. Ten a bien fantasear descubriendo calles donde fuiste grabando tu voz, el eco de las palabras que desataron la inocencia y vertieron la sencillez de tu figura menuda. Ve buscando las sombras que quedaron impresas en las paredes blancas, de los viejos caseríos, ventanas abiertas a huellas centenarias, y flirtear con la locura, con la ironía de la sinrazón, de que aparecerán en tus brazos por la intensidad imprimida. Nostalgia de los sentimientos bañados por el tiempo de los recuerdos que todavía devuelve la calidez de una sonrisa, velando por tus sueños, la tranquilidad de saber que reside en tu alma y que lo transmites con el ronroneo de alguna canción suave como una nana, que es ahora banda sonora del momento.
Disfruta de lo que se avecina ya que Tu eres el protagonista de esta película llamada vida, interpretada en uno de los mejores escenarios de este mundo, Sevilla y dotándolo de magia para que no le falte de nada en sus fiestas primaverales. Sigue dibujando el cartel soñado y hazlo conocer entre tu familia y amistades. Recorre las calles, alza la voz pintando con tus palabras los espacios y sigue tonificando los lugares para hacer el lienzo tan deseado por tus entrañas. Sigue dándole color a ese tapiz, pero siempre a tu manera. Así será la mejor forma de expresión para dibujar cada primavera tu cartel, tu Sevillania.

No hay comentarios:

Capirotes

  Funde el albor a plétoras, aunque se tracen las sombras, sentirás cómo el alma se ve desbordada por los clamores y las gracias que se tran...