martes, 7 de julio de 2015

San Fermin 15



La ilusión exultando nuestros rostros, abrigados por la melancolía del verano. ¿Sabes que el verano también tiene nostalgia? como si fuéramos, émulos de nuestro destino acogemos esta forma de entenderlo.   Apenas se traspasan los primeros días de Julio, y el calendario aumenta su densidad, abordando a recorrer los escaparates del recuerdo en un mes que te invita a todo lo contrario, a vivirlo. Son las expediciones  al espejismo, a la conquista de la magia que ofrecía tras los finos cristales que nos separaban de la fantasía, hechos agua, en cualquier piscina o playa como  juguete que siempre veíamos correspondido en estas fechas.
 
 Es el recuerdo de mi gente, la familia y una España dibujada en el recuerdo que parece que ya no vuelve.  Donde los sentimientos te bañaban con una sonrisa por sentir las tradiciones de vivir San Fermín, el día del Carmen y la Vela de Santiago ó Santa Ana  que los tuyos te hacían corresponder. Yo pedía un deseo ¿por qué siempre  el mismo? ¿Qué criterio manejaba? Ahora que va pasando el tiempo cobra más sentido, pues lo que se pedía, no era más que nada cambiase.           
Infantil filosofía de Peter Punk como dijo Sanz, somos nuestra historia y al revés, si tapo mis oídos se me va la libertad,  si no me entiendes, no te entiendo y al revés, siento un grito que no puedo interpretar. Intento disimular con el barrido ametrallado del presente, sin entender como dejamos que nuestras tradiciones se tiren por la borda poco a poco sin que nos demos cuenta de ello. Pero desde Pamplona nos dan una señal de realidad, sabiendo disfrazar el presente con nuestras costumbres, para seguir avanzando sin divagar en sortear la estupidez humana o limitando lo que fuimos. 
            Hoy como ayer sigo con el mismo ritual, pues así estamos hechos, con alguna que otra ausencia, pero con el mismo retorno de felicidad cuando en tertulia seguimos hablando de buenas ganaderías, Chupinazo, Charangas, Hemingway,  peñas, pañuelo rojo, color blanco, un periódico, procesión, corridas ,Santo,  Riau-Riau, pobre de mí, dormir en la calle, La Pañolada a San Fermín y con ello presenciar el comienzo del encierro por Santo Domingo, ver lo arriesgado de Mercaderes y estafeta mas contenida y despejada. Yo cada año los recorro con ellos sintiendo los escaparates del recuerdo, virar una esquina y sorprendernos con el entusiasmo por lo que amamos. El espectáculo mas bello y hondo que existe en nuestra tierra y que como siempre me trae multitud de imágenes del siglo pasado con evocaciones que pienso seguir viviendo. Así pues a disfrutar de San Fermín.

No hay comentarios:

Capirotes

  Funde el albor a plétoras, aunque se tracen las sombras, sentirás cómo el alma se ve desbordada por los clamores y las gracias que se tran...